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Honorato Bouyon Suché

Biografía

Bouyon Suché, Honorato. Vence (Francia), 1753 – La Habana (Cuba), 15.III.1849. Jefe de escuadra e ingeniero general de la Armada.

Era de origen francés, pero se desconocen sus antecedentes familiares y su educación francesa. Sólo se sabe que vino a España para incorporarse a las Guardias Valonas. Ingresó en el Regimiento de Guardias Valonas, que había creado Felipe V, como cadete (9 de septiembre de 1770). En 1779 ingresó en la Academia de Guardiamarinas de San Fernando e hizo estudios de Ingeniería naval. Embarcó en el navío San Justo (29 de noviembre de 1779) de la escuadra de Luis de Córdoba para realizar cruceros de vigilancia en las proximidades del cabo San Vicente, como consecuencia de la decisión de Carlos III de intervenir en la Guerra de la Independencia de Estados Unidos al lado de Francia; asistió al bloqueo de Gibraltar (febrero de 1780), distinguiéndose en varios combates, y en junio se reincorporó a la escuadra de Córdoba. Realizó varias comisiones fuera de la bahía gaditana, rompiendo el bloqueo inglés, y tomó parte en el apresamiento de un convoy británico de cincuenta y cinco velas, en el cabo de Santa María (9 de agosto de 1780). Obtuvo el empleo de alférez de fragata del Cuerpo de Ingenieros Navales (23 de abril de 1781) y transbordó al navío San Pascual (2 de julio de 1781). Salió para la expedición a Mahón (29 de julio), donde realizó las destacadas comisiones siguientes: en agosto fue designado ayudante mayor del Arsenal con el encargo de levantar y delinear varios planos de desembarcos y radas; luego se le nombró con otros oficiales para apresar y sacar seis embarcaciones inglesas refugiadas debajo del castillo de San Felipe y, el 5 de septiembre, tuvo que pasar al puerto de Fornells, donde estaban fondeados los navíos y demás buques del convoy, para montar dos baterías de dieciséis cañones, que construyó con alguna tropa y marinería, para impedir la entrada en la ría de los enemigos ingleses. Mientras tanto, ascendió a alférez de navío del Cuerpo de Ingenieros Navales (16 de septiembre de 1781). Luego se le encargó la construcción de otra batería de tres cañones de veinticuatro pulgadas, colocados a tiro de fusil del castillo de San Felipe para el mismo fin; obra ejecutada por Bouyon a pesar de la oposición de la mayor parte de la guarnición del castillo, que hizo una salida la noche del 11 de octubre para oponerse, provocando algunos muertos como consecuencia del primer fuego de las lanchas con cañón y pedreras que cubrían el desembarco enemigo. También fue comisionado para la formación y colocación de unas cadenas compuestas de cables y maderos que se colocaron a medio tiro de fusil del castillo, a fin de impedir cualquier salida enemiga hacia la dársena, y se ocupó varias veces de reparar los daños producidos por el fuego enemigo y la mar. En noviembre se le nombró ayudante mayor en la salida que hizo el jefe Ventura Moreno, embarcado en el jabeque San Bruno para perseguir algunos buques moros que se habían avistado. En diciembre, se encargó de la transformación de varios barcos en lanchas para su utilización en otras zonas de la isla. En 19 de enero de 1782, por falta de oficiales de Artillería, fue nombrado para la construcción y el mando de las baterías de trinchera, sin dejar el mando de cañones y bombardas; destinos que ocupaba durante la rendición del castillo de San Felipe. En 1 de marzo embarcó de segundo en el bergantín Finkastle, asignado a escoltar el convoy de prisioneros ingleses hasta el estrecho de Gibraltar, y quedó agregado a los buques que bloqueaban esa plaza.

Ascendió a teniente de fragata (2 de marzo de 1782). El 8 de diciembre embarcó en la batería flotante Divina Pastora, participó en los combates del día 13 y permaneció en el buque hasta que se determinó su abandono por los repetidos incendios que le ocasionó el fuego de la plaza. Ascendió a teniente de navío (21 de diciembre de 1782). Al desembarcar volvió a su destino en el bergantín Finkastle, incorporado de nuevo a la escuadra del general Córdoba para perseguir la escuadra y convoyes enemigos, y apresó al bergantín la Mineroa, que se dirigía a Gibraltar con tropas y vestuario. Fue restituido al Departamento de Cartagena (20 de mayo de 1783), donde fue destinado al Arsenal a las órdenes del comandante interino de Ingenieros y tuvo varios encargos, como el detall, la delineación en el patio de galibos y la construcción de la fragata Florentina y los navíos San Antonio y San Fulgencio. Al crearse las denominaciones de los distintos empleos del Cuerpo de Ingenieros Navales, aunque se le nombró ingeniero ordinario (24 de enero de 1784), conservó el de teniente de navío de Cuerpo General. Ascendió a capitán de fragata e ingeniero en segundo (9 de mayo de 1788).

El 6 de junio de 1788 fue destinado a la Comandancia de Ingenieros de Mahón, en la isla de Menorca, cuyo astillero adecuó para la construcción de fragatas. El 29 de mayo de 1789 fue nombrado comandante de Ingenieros del Astillero y el 25 de noviembre de 1791 se le confirió la subinspección de éste. Durante su permanencia en Mahón construyó dos gradas y en ellas las fragatas Mahonesa, Esmeralda, Diana y Venganza y el bergantín Corso; además habilitó, armó y remitió al Departamento de Cartagena sesenta lanchas de fuerza entre cañoneras, bombardas y obuseras.

Obtuvo la Comandancia de Ingenieros del astillero de La Habana (26 de mayo de 1792). Allí construyó el navío Príncipe de Asturias, concluyó la grada de Cajón e hizo otra nueva, donde construyó la fragata Anfitrite; alistó y dio varias carenas a flote a los buques de la escuadra del general Aristizábal y construyó varias lanchas cañoneras para la defensa de otra escuadra.

Reconoció los montes de la Luisiana, a orillas del Mississippi, hasta el fuerte de Nalches, donde crecen los mejores cipreses para arboladura, e hizo otros varios reconocimientos en los montes de la isla de Cuba para la más fácil conducción de maderas a La Habana y a las bahías de la costa; concluyó su destino en aquel astillero con la carena y alistamiento del navío de guerra francés Guerrero, que llegó del Guarico sin quilla, haciendo cincuenta pulgadas de agua por hora. Ascendió a capitán de navío e ingeniero en jefe (21 de abril de 1798). A fines de 1802 retornó a la Península, y fue relevado por Domingo de la Puente. A su llegada a España se le confirió la Comandancia de Ingenieros del Departamento de Cádiz. Ascendió a ingeniero director (16 de septiembre de 1804). En Cádiz realizó diferentes trabajos destacados, como fueron las carenas de varios navíos en diques, recorridos de otros a flote, la construcción y alistamiento de gran número de embarcaciones menores de todas clases y lanchas cañoneras y obuseras y, finalmente, la construcción de las goletas Verdad y Firmeza para ser utilizadas como correos del Rey. Fue promovido a brigadier (21 de octubre de 1806) y se le confirió el destino de ingeniero director en La Habana, encargado de los cortes de madera en la isla de Cuba, donde permaneció hasta que fue designado para la Comandancia de su ramo en el Departamento de Cartagena (29 de mayo de 1809). A su llegada a la capital departamental (17 de julio de 1811), no tardó mucho en solicitar y obtener una licencia de cuatro años a medio sueldo (14 de febrero de 1812) para establecerse en La Habana o en otro puerto de esa isla, astillero, carenero o fábrica, que tuviera relación con la industria de la mar. Transcurrido cierto tiempo sin tener noticias de Bouyón, el mayor general de la Armada ordenó su colocación en el escalafón de brigadieres de Cuerpo General, para poder optar a ascenso en su clase; no obstante, estuvo desempeñando muchos años la Comandancia de Ingenieros de La Habana, hasta que se le destinó al servicio pasivo de la Armada (20 de octubre de 1827), equivalente al pase a la reserva actual, y se le concedió permiso para seguir residiendo en La Habana (1 de diciembre de 1828).

Ascendió a jefe de escuadra sin aumento de su sueldo y honores (5 de julio de 1834). Entre el 8 de junio y el 24 de septiembre de 1840 se trasladó a la Península.

En 12 de enero de 1842 se le declaró de cuartel, exento de todo servicio, es decir, el equivalente al retiro actual. Falleció de muerte natural en su residencia de La Habana (29 de marzo de 1849).

 

Fuente y bibl.: Archivo-Museo Don Álvaro de Bazán (El Viso del Marqués, Ciudad Real), leg. 3408/12, exp. personal, 1850.

F. P. Pavía, Galería biográfica de los generales, jefes y personajes notables que figuraron en la misma corporación desde 1700 a 1868, t. I, Madrid, Imprenta de J. García, 1873, págs. 183- 189; Anónimo, “Salvamento del navío de guerra de S. M. C.

nombrado San Leandro, de 74 cañones, por el Brigadier e Ingeniero Director de la Real Armada Don Honorato Bouyon y su hijo Don Félix, Alférez de navío e Ingeniero extraordinario, del naufragio inevitable de que fue amenazado en su navegación desde el puerto de la Havana de Cuba al de Cádiz i donde conducía un tesoro de ocho millones de pesos fuertes, destinados a socorrer la Península” en Revista General de Marina (Madrid, Ministerio de Marina), t. 134, ene-jun, feb (1948), págs. 209-212; C. Martínez-Valverde, “Biografía de Honorato Bouyon” en VV. AA., Enciclopedia general del mar, t. II, Barcelona, Ediciones Garriga, 1957, págs. 158 y 159; F. González de Canales, “Biografía de Honorato Bouyon”, en VV. AA., Catálogo de pinturas del Museo Naval, t. III, Madrid, Ministerio de Defensa, 2000, pág. 169.

 

José María Madueño Galán