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Agustín Fernández de Velasco Bracamonte y Guzmán

Biografía

Fernández de Velasco Bracamonte y Guzmán, Agustín. Duque de Frías (X), conde de Peñaranda de Bracamonte (VI). Madrid, 1.IX.1669 ant. – 24.VIII.1741. Caballero de la Orden de Alcántara, gentilhombre de Cámara y sumiller de corps, Grande de España.

Segundo hijo de Antonia de Bracamonte Portocarrero y Luna (fallecida el 1 de febrero de 1703), V condesa de Peñaranda de Bracamonte, y de Pedro Fernández de Velasco y Tovar (II marqués del Fresno, embajador en Inglaterra y Francia, del Consejo y Cámara de Indias, gentilhombre de la Cámara de Su Majestad, consejero de Estado hasta su muerte en 1713); y hermano de María de Velasco y Bracamonte, que murió en 1684, casada con su primo Gregorio Genaro de Bracamonte, IV conde de Peñaranda de Bracamonte.

Fue bautizado el 1 de septiembre de 1669 en la parroquia de San Andrés de Madrid. Contrajo matrimonio con Manuela Pimentel Zúñiga (fallecida en 1742), hija de Francisco Casimiro Antonio Pimentel de Quiñones y Benavides (XII conde y IX duque de Benavente, XIII conde de Mayorga, XI conde de Luna, V marqués de Jabalquinto, IV marqués de Villarereal de Purullena, Grande de España, etc.), y de su segunda mujer Manuela de Zúñiga Sarmiento, hija de Juan de Zúñiga, IX duque de Béjar, y de Teresa Sarmiento de la Cerda. De este matrimonio nacieron Bernardino Fernández de Velasco Pimentel (27 de mayo de 1707-27 de diciembre de 1771), duque de Frías, VII conde de Peñaranda de Bracamonte, etc.; Martín Fernández de Velasco (Ramón por otras fuentes), duque de Frías, V marqués del Fresno y duque de Arrión —casó con Isabel María Spínola de Espínola, princesa de Morfeta, y en Peñaranda tuvieron tres hijos: Bernardino, que murió al poco tiempo, por lo que pusieron el mismo nombre a otro niño, y Antonia—; y María de la Concepción Fernández de Velasco Tovar Pimentel y Zúñiga, casada con Francisco Javier Osorio y Guzmán, VI marqués de Montaos, VI conde de Villanueva de Cañedo, IX conde de Grajal, X conde de Fuensaldaña, IX señor de Villacís y Cervantes, XIII señor de la casa de Rodríguez de Villafuerte y sus mayorazgos en Salamanca, luego XIII marqués de Alcañices y Grande de España, sin sucesión.

Agustín tuvo vacilaciones durante la Guerra de Sucesión Española a favor de uno y otro pretendiente, hasta el punto de que en 1706 se le prohibió la entrada en palacio, aunque acabó fiel a Felipe V y desempeñó interinamente el gobierno de la Real Cámara en varias ocasiones: primero a la muerte del marqués de Montealegre, en 1722, y, tras la incorporación a este cargo del marqués de Valero —más antiguo que él—, fue designado para cubrir sus ausencias.

Finalmente se le nombró sumiller, el 8 de enero de 1728, oficio que desempeñó hasta su muerte. En conjunto, fue quien durante más años ejerció el cargo de sumiller de corps de Felipe V.

Junto con el mayorazgo de Peñaranda heredó sus problemas: como consecuencia del concurso de acreedores que se produjo a la muerte sin descendencia legítima de Gregorio Genaro de Bracamonte —su primo—, el condado de Peñaranda había perdido parte de las rentas reales (primero y segundo ciento) que tenía compradas al Monarca. Sus padres habían participado en la puja pública para la recuperación de las mismas y también lo habían hecho los padres de la segunda esposa del citado primo Gregorio Genaro.

Pero, afortunadamente para el heredero, ambas familias habían llegado a un acuerdo amistoso por el que las rentas quedaban en poder de los marqueses del Fresno, con la condición de añadirlas perpetuamente al mayorazgo de Peñaranda y de comprometer todos sus bienes como garantía de dichas rentas y de las cargas que estaban impuestas sobre ellas. Las alcabalas, parte de las tercias y demás rentas estuvieron enajenadas durante casi dos años (1733-1735).

A la muerte del X duque de Frías, Antonio Díaz de la Huerta escribió una oración fúnebre para las honras del difunto que se celebraron en la Casa del Noviciado de la Compañía de Jesús de la Corte madrileña.

 

Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Nacional, Sección Nobleza, Frías, Peñaranda, legs. 641-52, 1452-29, 1629- 10, 1631-12, 1634-3, 1634-9, 1635-6, 1637-7; Consejos, leg. 28475, exp. 2; leg. 3976; Órdenes militares, libs. 220 y 221; Real Academia de la Historia, 14/114444 (10); Archivo General de Palacio (Palacio Real de Madrid), Felipe V, leg. 207; Luis I, cª 3.

A. Díaz de la Huerta, Oración fúnebre en las honras, que se celebraron en la casa de el noviciado de la Compañía de Jesús de esta Corte, día veinte y quatro de agosto, a la piadosa memoria del Excelentísimo Señor Don Agustín Fernández de Velasco, Tobar, Bracamonte y Luna, duque de Frías, conde de Haro y Peñaranda, etc. Por orden del Excelentísimo Señor don Bernardino Fernández de Velasco, su hijo primogénito. Díxola el Reverendísimo padre Antonio Díaz de Huerta...dedícasela al Excelentísimo Señor Don Bernardino Fernández de Velasco [...], Madrid, Imprenta de Lorenzo Francisco Mojados, 1742; A. y A. García Carrafa, Diccionario heráldico y genealógico de apellidos españoles y americanos, Madrid, Imprenta de Antonio Marzo, 1925; C. M. Gómez Centurión y J. A. Sánchez Belén (eds.), La herencia de Borgoña. La hacienda de las Reales Casas durante el reinado de Felipe V, Madrid, Centro de Estudios Políticos e Institucionales, 1999; C. Möller Recondo y A. Carabias Torres, Historia de Peñaranda de Bracamonte (1250-1836), Salamanca, Ediciones de la Diputación de Salamanca, Ediciones Bracamonte, 2003; C. M. Gómez-Centurión Jiménez, “Al cuidado del cuerpo del Rey: los sumilleres de corps en el siglo xviii”, en Cuadernos de Historia Moderna. Anejos, n.º 3 (2003), págs. 199-239.

 

Ana María Carabias Torres y Claudia Möller Recondo

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