Bogarín, Antonio. Paraguay, 1747 – p. s. xix. Misionero franciscano (OFM), apóstol de las etnias tobas, guanás y de la antigua reducción jesuita de Santa Rosa.
Nacido en 1747, profesó en la vida franciscana en 1765. Hay que considerarlo como uno de los misioneros más fecundos del último cuarto del siglo xviii; a él se deben los intentos y conquistas con una gran variedad de parcialidades indígenas, tanto en el norte como en el centro, incluido el Chaco.
Redujo y evangelizó a los indios guanás del norte paraguayo con fray Miguel Méndez Jofre. En 1769, Bogarín, con fray Pablo Casado, lograron reducir a la parcialidad guaná ethelenoé. Fueron tantas las necesidades que observó en esta empresa evangelizadora que el superior de las doctrinas se vio obligado a solicitar auxilio del cabildo eclesiástico para asistir tanto a los indios como a los doctrineros, sustentando el pedido en “las Cristianísimas leyes de Altar y Campana”. A la postre, dadas las dificultades extremas se vieron obligados a abandonar esta misión ethelenoé y, por decisión del padre superior, se trasladó el padre Bogarín a Asunción en espera de un nuevo destino.
En 1782, a solicitud del gobernador Melo de Portugal a los franciscanos, fray Antonio Bogarín nuevamente se involucró en la conversión de los tobas y fundó la reducción de San Antonio de Tobas, aunque en la banda occidental del río Paraguay. Durante diez años se dedicó a la ardua tarea de civilizarlos y evangelizarlos.
Lo propio intentó con los indios de Naranjay, pero vanos fueron sus esfuerzos debido a la inconstancia de los indios chaqueños.
Este hombre tan emprendedor, no satisfecho con lo realizado, en el Capítulo de 1787 recibió el destino para la atención de la reducción ex jesuítica de Santa Rosa (Misiones). Como si fuera poco, también se involucró en una expedición a Itapucú en 1792, ocasión que aprovechó para visitar y ver la situación de los anteriormente adoctrinados, sus indios guanás.
En 1796 era teniente cura de Caazapá y desde allí proyectó y llevó a cabo la fundación de San Juan Nepomuceno en 1797. Fue nombrado por el gobernador Ribera primer doctrinero de la reducción; importante pueblo hoy, se la considera última reducción del Paraguay. Allí permaneció Bogarín “un año y cinco meses y siete días”. Bogarín fue el iniciador de la evangelización de los indios charavanás.
No se conoce la fecha de su fallecimiento, puede ser inicios del siglo xix, pero como se ve su actividad misionera no conocía fronteras.
Bibl.: l. Cano, Las Órdenes religiosas en los treinta pueblos guaraníes después de los Jesuitas, Buenos Aires, 1975; M. Durán Estrago, Presencia franciscana en el Paraguay (1538- 1824), Asunción, Universidad Católica, 1987, págs. 182-184, 191-193, 250-252 y 410-412; E. O. Acevedo, La intendencia del Paraguay en el virreinato del Río de la Plata, Buenos Aires, Ciudad Argentina, 1996, págs. 286 y 347.
José Luis Salas
