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Domingo Bárcenas González

Biografía

Bárcenas González, Domingo. Salamanca, 18.III.1927 – Cercedilla (Madrid), 15.III.2000. Jugador, entrenador, profesor y gestor de balonmano.

Nació en el seno de una familia acomodada de Salamanca, ciudad en la que sus padres regentaban una pensión. Por problemas económicos, la familia se trasladó a Madrid en 1936, ciudad que ya no abandonó, aunque sin renunciar nunca a sus raíces salmantinas.

Realizó estudios de bachillerato elemental sin continuidad posterior al tener que colaborar en la economía familiar. Trabajó de administrativo en el Sindicato de Industrias Químicas y, posteriormente, en la empresa Transfesa, donde conoce a Anselmo López, histórico dirigente del baloncesto español y uno de los personajes claves en su vida.

Polifacético practicante deportivo, se aproxima inicialmente al baloncesto por la influencia del dirigente citado, destacando como hábil jugador en la posición de base en los clubes América, SEU y Real Madrid, jugando en este último durante las temporadas 1950-1951 y 1951-1952. Por sus condiciones técnicas, es seleccionado para participar con el equipo nacional en el primer Mundial de la historia en Buenos Aires, en 1950. A la sazón, practica el balonmano y el béisbol (su verdadera pasión y en la que igualmente destacó como pitcher) y, en plena juventud, aprobó con el número uno de su promoción el curso de Entrenador de Baloncesto, ejerciendo como tal en el club Standard de Madrid hasta 1957, fecha en la que abandonó definitivamente este deporte para iniciar su amplia y brillante carrera en el balonmano.

En esta etapa polivalente como jugador en activo, además del baloncesto ya citado, adquirió relevancia internacional en el Atlético de Madrid de Balonmano, en el que se inicia en la modalidad de “balonmano a once” en 1948, en la que, al igual que en la actual de “balonmano a siete”, llegó a ser internacional y campeón de España. Transcurre su vida, previa a su matrimonio con Maite Alcaraz —igualmente jugadora de balonmano—, alternando como jugador en balonmano y entrenador de baloncesto al tiempo que mantiene su trabajo de administrativo hasta 1957, año en el que Alberto de San Román y de la Fuente, presidente de la Federación Española de Balonmano y otra de las personas fundamentales en su vida, le incorporó a la misma y le nombró director de la recién creada Escuela de Preparadores de este deporte, paso decisivo para su futuro como profesor y técnico.

A partir de la fecha citada, su actividad se multiplica y acelera alrededor del balonmano. En 1958 fue nombrado seleccionador nacional, responsabilidad que ejerce de manera continuada hasta 1973 y que alterna desde 1960 como entrenador del club Atlético de Madrid, el equipo de su vida. Se inició así el período clave de su formación y perfeccionamiento como entrenador de primer rango y que avala de inmediato con cuatro títulos consecutivos de campeón de liga, 1961-1962, 1962-1963, 1963-1964 y 1964-1965. Ya, por entonces, la dedicación a este deporte pasa a ser el único fin en su vida profesional.

Su labor docente desde la Escuela Nacional de Entrenadores ha sido considerada modelo de seriedad, calidad y rigor en la formación de los técnicos de esta especialidad. Se documentó en las fuentes de la escuela rumana, por aquel entonces savia fértil de la metodología en balonmano, y lucha, con enormes esfuerzos, por su limitada base cultural, por establecer una escuela propia y sistematizada de los contenidos del balonmano en España, logro sin duda del que dejó muestras en publicaciones, artículos e infinidad de cursos. Su nombramiento, por José María Cagigal, como profesor del recién creado Instituto Nacional de Educación Física (INEF) de Madrid en 1967 le exigió un esfuerzo pedagógico y metodológico en la programación de contenidos de este deporte y, con estilo docente peculiar y carismático, vertió enseñanzas en generaciones de alumnos iniciadas años antes en la desaparecida Escuela de Especialidades Julio Ruiz de Alda en Educación Física para mujeres. Su aportación pedagógica ha sido clave en este deporte, por lo que se le considera el “padre del balonmano español”. Se jubiló como profesor del INEF en 1987 cuando asumía responsabilidades directivas como secretario general del centro.

Se apasionó en su cargo de seleccionador —“el equipo nacional”, como le gustaba decir—, cargo que ejerció desde 1958 hasta 1981; en diferentes etapas, dirigió la selección absoluta masculina, femenina y junior masculina; abrió el balonmano español al mundo sin enrojecerse por las derrotas en los momentos de aprendizaje; tuvo el honor de entrenar la selección en el debut olímpico del balonmano en Múnich 1972 y culminó su etapa como seleccionador con el título de Campeón del Mundo, categoría B, en Barcelona 1979 y la más que preciada quinta plaza en los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980. Abandonó la selección en 1981 con enorme éxito y dignidad tras colocar el balonmano español en lugares de privilegio.

Ya en plena madurez, sus últimos años como entrenador los dedicó al club Caja Madrid, con el que consiguió resultados inesperados en momentos de enorme competencia y dificultad; una vez retirado, en 1991 le seduce la idea de devolver al balonmano de manera generosa todo lo que recibió y, con esa idea, se presenta como candidato a las elecciones a la Presidencia de la Real Federación Española de Balonmano, cargo para el que es elegido en diciembre de 1992 y que ostentó hasta 1996 con la condición de “cargo no profesional”. Fue la muestra de agradecimiento a su deporte. En ese período, el balonmano español consiguió la Medalla de Plata en el Campeonato de Europa de 1996 y culminó su sueño con la medalla de bronce olímpica en los Juegos Olímpicos de Atlanta.

En silencio y con enorme dignidad sufrió una dura enfermedad que le quitó la vida en marzo del año 2000 al tiempo que estudiaba aún y disfrutaba del crecimiento imparable del deporte al que dedicó su vida. Su categoría profesional y humana se puede resumir con palabras como maestro, autodidacta, apasionado, infatigable y generoso en el esfuerzo. Rica e imprescindible fue la aportación del maestro Bárcenas al balonmano, no siempre bien comprendida ni valorada.

 

Obras de ~: con G. López Cuadra y L. Hernández del Pozo, Balonmano en sala. Técnica, Táctica y Preparación Física, Madrid, Federación Española de Balonmano (FEBM), 1960; Balonmano, curso de especialización, Madrid, INEF, 1973; Técnica (Texto oficial de la Escuela Nacional de Entrenadores), Madrid, FEBM, 1976; Los XXI Juegos Olímpicos, Montreal, 1976 (Comunicación Técnica), Madrid, FEBM, 1976; Táctica individual ofensiva del jugador de campo, Madrid, FEBM, 1981; Táctica colectiva ofensiva, Madrid, FEBM, 1981; con J. de D. Román Seco, Balonmano, Técnica y Metodología, Madrid, Gymnos, 1991.

 

Bibl.: VV. AA., II Jornadas sobre especialidades deportivas: Perfeccionamiento Entrenadores Balonmano, Málaga, UNISPORT, Junta de Andalucía, 1986, págs. 95-98; M. Meléndez, Historia del Balonmano, Madrid, FEBM, 1992, págs. 765-769; J. Antón, Balonmano, Táctica Grupal Ofensiva, Madrid, Gymnos, 1998, págs. 43, 160 y 280; Táctica Grupal Defensiva, Granada, Grupo Editorial Universitario, 2002, passim; F. Sánchez, “Balonmano”, en Fuentes documentales deportivas aplicadas a la historia de un club deportivo español: Historia del Club Atlético de Madrid, tesis doctoral, Madrid, Universidad Complutense, Facultad de Ciencias de la Información, 2005 (inéd.); J. D. Román, “Los inicios del Siglo XXI: Evolución y Tendencias del juego”, en Seminario Internacional Memorial Domingo Bárcenas, Zaragoza, 2005, págs. 12-13 (inéd.).

 

Juan de Dios Román Seco