Marco y Rodrigo, Manuel. Bello (Teruel), 15.IX.1817 – Caminreal (Teruel), 30.VI.1885. Comandante general de los carlistas aragoneses entre 1872 y 1874.
De familia hidalga de pequeños propietarios aragoneses, su padre, Mariano —hermano del cardenal Juan Francisco Marco—, había participado en la Guerra de la Independencia como capitán de Húsares a las órdenes del general Villacampa. Manuel Marco vivió todos los movimientos carlistas del siglo XIX de una forma activa y continuada. La actividad fue principalmente militar, aunque durante el período de Carlos (VII) desarrolló también una relevante actividad política. Su incorporación activa al carlismo tuvo lugar en 1836, año en que se incorporó al frente de un grupo de mozos de un pueblo a las tropas del entonces brigadier Cabañero.
Participó el 5 de marzo de 1838 como capitán del sexto batallón de Aragón en la entrada a Zaragoza. En esta acción fue herido y ascendió a comandante. También estuvo en el sitio de Morella, en el que fracasó. El 12 de octubre de 1838 cayó prisionero en los Pinares de Soria. Condenado a muerte, la ejecución se dilató y la firma del Convenio de Vergara hizo que quedara en libertad. Pasó a Francia para volver a su pueblo acabada la guerra.
En 1855 secundó el movimiento del capitán Corrales que se sublevó en Zaragoza con un Regimiento de Caballería. Tras la prisión y fusilamiento del capitán Corrales, Manuel Marco emigró a Portugal, donde recibió el grado de coronel. Secundó y participó igualmente en la preparación del pronunciamiento del general Ortega en 1860. Tras esta fecha fue nombrado brigadier. En julio de 1868 asistió en Londres a la junta que tuvo lugar para la reorganización del carlismo y allí fue nombrado mariscal de campo y recibió la Gran Cruz de la Real Americana Orden de Isabel la Católica.
El día 24 de abril de 1872 inició el levantamiento carlista en Aragón. Poco después fue nombrado por don Carlos comandante general de Aragón. A él se debió la organización del ejército de Aragón, la ocupación de Cantavieja, la fundación en esta villa —que fue capital del carlismo aragonés— de una academia de cadetes e incluso una fábrica de armas. En realidad hasta octubre de 1873 no consiguió reunir algo que pudiera considerarse un ejército. Fue a partir del 12 de octubre en que reunió en Estercuel (Teruel) mil doscientos hombres, cuando comenzó una actividad real del ejército carlista de Aragón, mucho menos fuerte hasta entonces que el que operaba en Cataluña.
El 27 de octubre entró Marco en Molina de Aragón y a partir de aquí obtuvo diversos éxitos. En las Memorias de María de las Nieves puede observarse cómo era más valorado por Alfonso como organizador y administrador que como estratega militar.
Numerosos testimonios documentales dan fe de que fue el “líder natural” de los carlistas de Aragón, pese a lo cual el fracaso del sitio de Teruel el 5 de julio de 1874 hizo que fuese destituido de su cargo y se lo sometiera a un consejo de guerra en el cual fue rehabilitado (Horta, 1 de marzo de 1875). Ofreció Dorrejaray a Marco la presidencia de la Diputación de Aragón, que Marco no aceptó, marchando a Durango, donde mantuvo una entrevista con don Carlos. El 7 de noviembre el pretendiente carlista se entrevistó nuevamente con Manuel Marco para preguntarle sobre la posible reactivación de la guerra en Aragón. Marco pasó finalmente a Francia sin volver a Aragón estableciéndose en Burdeos hasta finales de 1876, fecha en que regresó a Bello. El archivo familiar da cuenta de que Marco todavía en los últimos años mantuvo su fidelidad con la causa que siempre defendió, manteniendo correspondencia con Valdespina, el marqués de Cerralvo o Ramón Esparza. En 1936, en la Guerra Civil, se formó un tercio de requetés al que se dio su nombre “Marco de Bello”.
Su archivo se guarda actualmente en casa de sus descendientes en San Martín del Río (Teruel).
Bibl.: F. de P. Oller, Álbum de personajes carlistas con sus biografías, t. II, Barcelona, La Propaganda Catalana, 1887-1891, pág. 196; R. Brea. Príncipe heroico y soldados, Barcelona, La Bandera Regional, 1912, págs. 156-159; M. Polo y Peirolon, El guerrillero. Novela tejida con retazos de la historia militar carlista, Valencia, Moderna, 1906; J. M. de Jaime Loren y J. de Jaime Gómez, Manuel Marco y Rodrigo, Calamocha, Centro de Estudios del Jiloca, 1992.
Francisco Asín Remírez de Esparza
