Sagrera, Guillem. Felanitx, Mallorca (Islas Baleares), c. 1380 – Nápoles (Italia), XI.1454. Arquitecto, escultor y empresario artístico.
Nació en el seno de una familia dedicada, a lo largo de varias generaciones, a la construcción y a la talla y transporte de piedra. Numerosos parientes coetáneos del maestro (hijos, primos, sobrinos, etc.) se asociaron a sus empresas artísticas y formaron un potente clan profesional y empresarial, aglutinado por el talento artístico y organizador de Guillem Sagrera, según se desprende del número y de la importancia de las obras acometidas, a veces muy alejadas geográficamente entre sí.
La primera noticia de la actividad de Guillem le sitúa, en 1397, muy joven aún, tallando piedra junto a su padre y un primo en las canteras de Felanitx para el Portal del Mirador de la Catedral de Palma. En esta obra trabajaban algunos maestros procedentes de diferentes territorios del norte de Europa, que debieron de ejercer una indudable influencia en su posterior aventura continental.
Hacia 1404 debió de trasladarse a Perpiñán, tal vez como ayudante del picardo Pierre de Saint-Jean. En esta ciudad contrajo primeras nupcias y de esta unión nacieron Antoni, mercader y eventualmente arquitecto, Jaume, arquitecto, y Francesc, sacerdote, arquitecto y escultor. De un segundo matrimonio tuvo a Guillem, sacerdote, Joan, arquitecto y religioso, y, al menos, dos hijas. De esta numerosa prole, Jaume y Francesc destacaron en el terreno artístico. Hay que advertir que los nombres de los hijos coinciden a veces con los de otros miembros de la familia, también asociados a la actividad artística de Sagrera.
La primera noticia profesional de Guillem como maestro independiente es de 1410, cuando contrató un púlpito, no conservado, para los franciscanos de Perpiñán, asociado con el normando Raulí Vauter. Como encargado de las obras del obispado de Elna, reparó la base del campanario de la Catedral (1415) mediante una solución en talud que se reencuentra en obras posteriores. En calidad de maestro mayor de las obras de San Juan el Nuevo de Perpiñán participó en el congreso de arquitectos de Girona de 1416, convocado para decidir sobre la prosecución de la Catedral a una o a tres naves en el que se mostró partidario de la primera opción, coherentemente con el concepto del espacio, amplio y unitario, que revelan sus obras. Contaba ya con un prestigio consolidado. Se le atribuye la decisión del cambio de forma de San Juan el Nuevo (1433) y la ejecución de su sacristía (1433- 1447), de planta extremadamente irregular, donde ya se planteó la absorción de los nervios de la compleja bóveda en el muro y en el pilar central sin ningún elemento de intermediación, en un refinado trabajo de estereotomía. Este tratamiento es una especie de marca de fábrica en las creaciones de Guillem Sagrera.
La etapa central de su carrera se inicia cuando Sagrera se trasladó a Palma hacia 1420, donde actuó como maestro mayor de la Catedral hasta 1447, año en el que viajó a Nápoles. Para el Portal del Mirador labró las esculturas de San Pedro (1422) y de San Pablo, que definen su estilo escultórico dentro de la renovadora corriente borgoñona surgida en Dijon de las manos de Claus Sluter, cuyo estilo debió de conocer durante su estancia en tierras de Francia. También se le ha atribuido la excepcional Virgen del mainel. Más o menos al mismo tiempo inició la construcción de la Lonja por encargo del Colegio de Mercaderes, el más notable edificio en su género de su tiempo y el más amplio catálogo del artista como escultor. Mediante el contrato definitivo, que data de 1426, Sagrera asumió también la función de contratista. Abandonó finalmente la obra, ya muy avanzada, por desavenencias económicas insuperables con los mercaderes; este hecho desembocó en un pleito zanjado en 1533, cuando los biznietos de Guillem Sagrera recibieron la anhelada compensación económica del Colegio de Mercaderes, que ascendió a 1025 libras. Antes de arruinarse en esta obra, Sagrera había alcanzado una situación económica holgada y vivía cómodamente, ya que su equipo prácticamente acaparaba las obras más importantes de Mallorca.
En Palma contó con la colaboración destacada de un sobrino llamado Antonio, que no debe ser confundido con el hijo del mismo nombre, que trabajó con Guillem Sagrera en la Catedral, en la iglesia de Santa María de la Gracia, en la Lonja, y, más tarde, en Italia.
En la Catedral también contó con la colaboración de su primo Miguel, entre otros. El desastre económico de la Lonja le condujo finalmente a Nápoles, al servicio de Alfonso el Magnánimo. Como maestro mayor del Castel Nuovo, Sagrera transformó radicalmente el antiguo castillo de la dinastía de los Anjou, del que tan sólo se conservó, y aun con reformas, la capilla palatina. El programa de esta imponente edificación planteaba la necesidad de una sólida y moderna fortificación, de acuerdo con el progreso de la artillería en aquellos años, además de la magnificencia y suntuosidad propias de una residencia real, que aprovechaba al mismo tiempo las ventajas de la inmejorable situación del Castel Nuovo angevino. Si bien debe ser adjudicado a Guillem Sagrera todo el proyecto, excepto el arco de triunfo que decora el ingreso, el artista sólo ejecutó directamente la audaz Gran Sala, que no pudo finalizar, pues falleció en 1454.
Esta obra fue terminada en 1457 por un equipo formado por su hijo Jaume, su primo Joan Sagrera, su ayudante Joan Trescoll y otros dos arquitectos italianos. Además de los mencionados, otros artistas vinculados familiarmente con Guillem Sagrera, pero de los cuales se ignora el grado exacto de parentesco, son: Vicenç Sagrera, activo en Palermo a finales del siglo xv, y Bartomeu y P. Sagrera, que trabajaron en el claustro de la Catedral de Barcelona en 1436. Fuera ya del ámbito familiar, cabe destacar asimismo la colaboración con Sagrera de los miembros de la familia Vilasclar y la vinculación profesional, al parecer intermitente pero sin duda importante, con el normando Raulí Vauter. Guillem Sagrera está considerado el arquitecto más relevante y con más proyección e influencia del arte medieval mallorquín.
Obras de ~: Esculturas de San Pedro y San Pablo, Portal del Mirador, Catedral de Palma de Mallorca, c. 1422; Lonja de Palma de Mallorca, c. 1426; Sacristía de San Juan el Nuevo, Perpiñán, 1433-1447; Gran Sala del Castel Nuovo, Nápoles, c. 1452.
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María Rosa Manote Civilles
